Dentro de la Rehabilitación Física, una de las modalidades terapéuticas más utilizadas es la hidroterapia. El uso de la misma se remonta a la época de la antigua Grecia, en donde se aprovechaban los beneficios médicos y espirituales de la misma. Desde entonces ha sido utilizada por la civilización hasta la actualidad.
La hidroterapia es la aplicación del agua con fines terapéuticos. Esta se puede aplicar externamente, ya sea por inmersión de la totalidad del cuerpo o partes del mismo. Esta técnica proporciona un entorno óptimo para el tratamiento de las disfunciones físicas que conllevan una incapacidad para poder realizar determinadas actividades o ejercicios.
El agua tiene propiedades que favorecen no solamente el aspecto físico gracias a la sensación de bienestar que produce, sino que también tiene un impacto positivo en el funcionamiento mental.
Los efectos fisiológicos de la hidroterapia son muy diversos, pues dependiendo de su aplicación puede influir en diferentes sistemas del cuerpo. Entre sus beneficios más importantes se encuentran:
Existe una gran variedad de enfermedades y lesiones que se pueden ver beneficiadas gracias a la hidroterapia, entre ellas figuran las siguientes:
De tipo músculo-esquelético:
De tipo neurológico:
Recuerda que cualquier tratamiento de rehabilitación debe estar indicado y supervisado por un médico especialista. ¡Contáctanos para agendar tu cita de valoración!